El proyecto se engloba bajo el paradigma de la Industria 4.0, pero hay que tener claro que éste no es una realidad ya consolidada, sino un nuevo hito que se abre en el mundo industrial y que marcará grandes cambios socio-económicos en los próximos años. El objetivo es desarrollar plantas industriales más inteligentes, respetuosas con el medio ambiente y obtener cadenas de producción conectadas entre sí.
La Industria 4.0, de base puramente tecnológica, implica un buen grado de automatización y de digitalización. Estos upone un cambio radical en la forma de entender y proceder en la industria actual y conlleva cambios importantes en las plantas industriales que tienen que ser adoptados por las empresas para no quedarse atrás en la carrera tecnológica y sacar todo el provecho con el fin último de mejorar su competitividad.
El control actual de los procesos industriales se realiza de una manera altamente centralizada y jerárquica. Los conceptos futuros como la automatización basada en componentes y la automatización colaborativa, como se planea introducir con las iniciativas de Fabricación Digital o de la Industria 4.0 allanando el camino para la 4ª revolución industrial, requieren funcionalidades de control mucho más distribuidas.
Para apoyar este reto, OPTIMUM aborda la mejora de los aspectos del control distribuido, la adaptación de las tecnologías IoT a las necesidades industriales, la mejora del control y las aplicaciones mediante el contexto y la localización, así como el diseño de aplicaciones de ingeniería y monitorización 3D basadas en modelos comunes.
Por lo tanto, el proyecto internacional contribuirá a preparar tecnológicamente a los socios y a la industria en general, para los nuevos desafíos de la Industria 4.0.
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