El director de Hidráulica y Medioambiente de la compañía, Arturo Buenaventura, ha señalado que el proyecto de la desaladora que desarrolla la compañía está «muy avanzado» y se encuentra en plena tramitación

Grupo Joly ha organizado el desayuno de redacción “Recursos hídricos en la Axarquía” en Málaga para abordar la compleja situación a la que se enfrentan los agricultores y productores de la zona con relación a la falta de infraestructuras hídricas, que ha desembocado en una disminución de las cosechas.

El encuentro ha contado con la participación del director de Hidráulica y Medioambiente de Magtel, Arturo Buenaventura; el director general de Trops, Enrique Colilles; el director de Reyes Gutiérrez, Juan Antonio Reyes, así como los presidentes de la Junta Central de Usuarios del Sur del Guaro y de la Junta Central de Regantes de la Axarquía, José Ricardo Campos y José Carlos Gil, respectivamente.

Los participantes han debatido sobre la situación hídrica que atraviesa la comarca, las previsiones de producción que esperan este 2023, la gobernanza del agua de la zona y las soluciones a medio y largo plazo que pueden sacar a la Axarquía de la crisis que atraviesa.

Todos de forma unánime han expresado su total acuerdo con el proyecto de la desaladora como herramienta para paliar la situación. Tal y como han afirmado, el problema no reside en la escasez de agua, sino en la falta de infraestructuras que permitan la desalación del agua del mar y la reutilización de aguas regeneradas. Además, han insistido en la necesidad de apostar por la tecnología para abaratar el precio del agua.

En estos momentos, el proyecto de la desaladora se encuentra en plena tramitación. Todavía se desconoce cuál será la compañía encargada de ejecutarla, aunque el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, aseguró que daría una respuesta durante el mes de junio.

Por otro lado, el Gobierno Central aprobó en un real decreto-ley la construcción de una desaladora en Málaga y Moreno indicó que esta iría junto a la que la Junta quiere llevar a cabo. En este sentido, los expertos que han conformado la mesa de debate han señalado que lo lógico sería construir sólo una desaladora en esta comarca que cubra las necesidades que tiene la zona.

A este respecto, Buenaventura ha considerado que “la Junta debería tener la capacidad de seguir adelante” con este proyecto que ya tenían previsto.

El directivo de Magtel ha indicado que el proyecto se encuentra “muy maduro”. Según Buenaventura, si se decantan por esta propuesta y se acelera la tramitación, la desaladora de la Axarquía podría llegar a estar en operación para 2026. Desde Magtel llevan trabajando desde 2020, ya se han realizado los trabajos de campo y también se tiene redactado el Estudio de Impacto Ambiental.

Por su parte, tanto José Ricardo Campos como José Carlos Gil han coincidido en que en la comarca no se ha gestionado bien el agua por parte de las administraciones nacionales, regionales y locales, por lo que demandan infraestructuras hídricas -en línea con la demanda que hacen los empresarios del proyecto- y una modificación de la legislación que permita mejorar el anterior sistema. Asimismo, han reclamado una mayor implicación de los ayuntamientos en torno al seguimiento de las tuberías de aguas regeneradas para que no tengan más de un gramo de conductividad de sal, ya que sino no servirían para regar los cultivos.