En los últimos meses estamos asistiendo a un debate muy importante sobre la velocidad necesaria para cumplir los objetivos marcados por la Comisión Europea y los gobiernos del continente para la transición energética. Un debate que, en realidad, es global, pero que se ha acelerado tras el escenario de inestabilidad geopolítica que se ha abierto tras la invasión rusa de Ucrania.
Las nuevas circunstancias planteadas por el conflicto, que en materia energética implican reducir al máximo la dependencia europea del gas y el petróleo ruso, han levantado dudas sobre la capacidad efectiva de llevar a cabo los principales hitos de la transición energética en tiempo y forma. Dudas, fundamentalmente, en cuanto a mantener más tiempo de lo establecido el uso de los combustibles fósiles por el coste de sustitución ruso y el aumento de las inversiones públicas para asegurar los abastecimientos y almacenamiento por ello.
Sin embargo, buena parte de las posiciones institucionales, empresariales y sociales reclaman acelerar la apuesta por las energías limpias, desde los países más afectados por el conflicto, Alemania por ejemplo, hasta quienes estamos avanzando a buen ritmo en la generación de electricidad de origen renovable, como en España. De hecho, los datos del operador nacional, Red Eléctrica, muestran cómo esa generación es cada vez mayor e, incluso, rozando el cien por cien, como sucedió a primeros de abril aunque fuese por un corto espacio de tiempo y de forma puntual.
En Magtel estamos convencidos de que esa es la única vía para cumplir con la transición
energética que nos llevará a un mundo más sostenible y con unas enormes e insospechadas posibilidades de crecimiento y desarrollo. No es el momento de ir hacia atrás, sino de reimpulsar los objetivos que marcan las políticas públicas tras la pandemia: una ambiciosa agenda verde y una profunda transformación tecnológica.
Por ello, nuestro Plan Estratégico pivota sobre dichos ejes trabajando en líneas bien definidas para la sostenibilidad medioambiental y la digitalización. Líneas que dotan a las infraestructuras de los sistemas tecnológicos más avanzados y eficientes para el uso de los recursos naturales y que persiguen la excelencia en el respeto y cuidado del medio ambiente a través de la calidad profesional de nuestros equipos a la hora de ejecutar los proyectos.
Actualmente, en buena parte de los proyectos que llevamos a cabo en Andalucía, estamos aportando soluciones tecnológicas, tanto en materia de eficiencia energética como en TD, para la industria y las infraestructuras de la Comunidad. Proyectos junto a empresas relevantes andaluzas así como para las distintas administraciones, que nos permiten desplegar nuestros mejores recursos y aplicar la innovación constante que caracteriza nuestra acción empresarial.
Finalmente, respecto a la sostenibilidad medioambiental, quiero destacar dos compromisos. El referido a la implantación de los criterios ESG como referencia de identidad empresarial y el que asumimos con los ODS para generar un impacto positivo en la sociedad a la hora de realizar nuestras actividades. Compromisos que nacen de nuestros valores y que muestran nuestra determinación por la sostenibilidad a todos los niveles. En Magtel lo hacemos a diario, porque está en nuestro ADN.